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El Mundo no Puede Esperar moviliza a las personas que viven en Estados Unidos a repudiar y parar la guerra contra el mundo y también la represión y la tortura llevadas a cabo por el gobierno estadounidense. Actuamos, sin importar el partido político que esté en el poder, para denunciar los crímenes de nuestro gobierno, sean los crímenes de guerra o la sistemática encarcelación en masas, y para anteponer la humanidad y el planeta.




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Fotos y Reportaje: 29ª Vigilia mundial mensual por el cierre de Guantánamo, 4 de junio de 2025

10 de junio de 2025
Andy Worthington


Fotos de algunas de las vigilias mensuales coordinadas del "Primer Miércoles" por el cierre de Guantánamo el 4 de junio de 2025. En el sentido de las agujas del reloj, desde arriba a la izquierda: Bruselas, Nueva York, Washington D.C. y Londres.

El miércoles 4 de junio, activistas de todo Estados Unidos -en Washington, D.C., Nueva York, San Francisco, Los Ángeles y Detroit- y de Londres, Bruselas y México D.F. celebraron las últimas vigilias coordinadas del "Primer Miércoles" para pedir el cierre de la prisión de Guantánamo, declarada en guerra contra el terrorismo. En Belgrado, el ex preso Mansoor Adayfi celebró una vigilia en solitario, y el sábado 7 de junio, los activistas de Cobleskill, Nueva York, culminaron la semana de acciones con una desafiante protesta bajo la lluvia.

No tengo palabras para expresar mi admiración por la pequeña pero gran familia mundial de activistas que se reúne una vez al mes para desafiar la amnesia colectiva en la que, en su mayor parte, se ha sumido Guantánamo durante la mayor parte de sus desdichados 23 años de existencia. Muchas gracias a los participantes, de varios grupos de Amnistía Internacional, Close Guantánamo, la UK Guantánamo Network, Witness Against Torture, El Mundo no Puede Esperar, los Peacemakers of Schoharie County, y varios grupos activistas de la ciudad de Nueva York, así como otros numerosos grupos de apoyo.

A continuación puedes ver fotos de las vigilias, y sigue leyendo para ver mi evaluación de por qué sigue siendo importante hacer campaña por el cierre de Guantánamo - incluyendo la crueldad performativa del uso de Donald Trump de la prisión en su horrenda "guerra contra los migrantes", y cómo, sin darse cuenta, ha demostrado que la prisión en sí, a pesar de que todavía alberga a 15 hombres, se ha vuelto políticamente irrelevante, fomentando los argumentos para su cierre.


Activistas frente a la Casa Blanca en Washington, D.C., el 4 de junio de 2025. Helen Schietinger, de Witness Against Torture, escribió: "Judith, David y yo conseguimos un sitio a la sombra junto a la valla", hasta que fueron desplazados por la policía (véase la foto de abajo).



Activistas en Londres, frente a la embajada estadounidense en Nine Elms, el 4 de junio de 2025. Andy Worthington afirma: "Aunque en la foto sólo salimos tres, en total aparecieron siete activistas durante los 90 minutos que pasamos allí. Algunos venían del Parlamento, donde una protesta extraordinariamente concurrida, la Línea Roja por Palestina, había reunido a miles de activistas, vestidos de rojo, rodeando todo el Parlamento para animar al gobierno laborista de Keir Starmer a aplicar inmediatamente un embargo de armas contra Israel y a pedir un alto el fuego inmediato e incondicional. En Nine Elms, nos dio una calurosa bienvenida el Campamento Comunitario por Gaza, que lleva instalado 18 meses, algunas de cuyas pancartas pueden verse al fondo de la foto". (Foto: Andy Worthington).



Activistas en Nueva York el 4 de junio de 2025, en las escaleras de la Biblioteca Pública de Nueva York en la Quinta Avenida y la calle 42 en Manhattan. Felton Davis, escribió: "Gracias a todos los que asistieron a la vigilia del 4 de junio en las escaleras de la Biblioteca Pública, donde nos enfrentamos a una situación muy confusa y difícil - las personas que están siendo barridas y retenidas en los centros de procesamiento de ICE, los detenidos 'autorizados para su liberación', pero no pueden ir a ninguna parte, los prisioneros de la guerra contra el terrorismo a largo plazo todavía en las cárceles de EE.UU., y en el lado esperanzador, una serie de notables liberaciones y conmutaciones" (ver aquí). Felton añadió: "¿Cómo mantener la cordura en medio de una crisis social, económica, política y ecológica generalizada?  No tengo ni idea. Sé que con Trump se supone que volveremos a la vieja gestalt de hombres blancos angloparlantes controlándolo todo, pero me he enganchado a nuevas ideas como compartir, cooperar, consensuar y diversidad, así que quizá no sea posible retroceder. Confieso que soy un adicto a la información, pero hay días en que ni siquiera soporto consultar las noticias". (Foto: Felton Davis).



Activistas en San Francisco, en el distrito de la Misión, el 4 de junio de 2025. Gavrilah Wells escribió: "Los transeúntes nos dieron una calurosa bienvenida y sonaron muchas bocinas. La gente cogió octavillas, firmó postales y recogió varias de las peticiones en línea pidiendo el cierre de Guantánamo, la liberación de Mahmoud Khalil, el retorno de Andry José Hernández Romero, Kilmar Abrego y los MUCHOS otros expulsados ilegalmente a El Salvador, la detención de la máquina de deportación ilegal y la inversión en nuestras comunidades. Se nos unió Changüisónico, músicos que tocan música Changüí, una música preciosa y conmovedora de Guantánamo, Cuba. Después de la vigilia muchos de nosotros fuimos a Radio Habana y escuchamos a la banda al completo tocar más Changüí".



Activistas ante el edificio federal de Westwood, en Los Ángeles, el 4 de junio de 2025. Jon Krampner, que suele celebrar vigilias en solitario, escribió: "Ayer nos presentamos en el edificio federal de Westwood, y quiero decir “nos presentamos”. Me acompañaron Julie y Kate, dos compañeras de viaje políticas. Un aumento del 300% sobre nuestra asistencia habitual. Si bien hay más tráfico de automóviles en el Edificio Federal de Westwood que en el Edificio Federal del Centro de Los Ángeles, hay menos tráfico a pie, por lo que no hay muchas interacciones que reportar más allá del vagabundo de derechas que se detuvo brevemente a charlar con nosotros. El tráfico de Wilshire Boulevard tocaba el claxon de forma intermitente, aunque, con las capuchas puestas, es difícil saber si los hacían en solidaridad o simplemente molestos porque el coche de delante no se alejaba lo bastante rápido cuando el semáforo se ponía en verde. Aun así, nos ve mucha más gente en Westwood que en DTLA".



Activistas frente a la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México el 4 de junio de 2025. Natalia Rivera Scott escribió: “Mary, Alli y Bob de AI Américas ".



Manifestantes ante el Parlamento Europeo en Bruselas el 4 de junio de 2025.



Activistas frente al edificio federal Patrick V. McNamara de Detroit el 4 de junio de 2025. Geraldine Grunow escribió: "Sólo tres de nosotros (Ken, Geraldine y Dan) pudimos ir y, para ser sincera, estábamos bastante desanimados por la falta de apoyo de los coches que pasaban. Tal vez fuera el bochorno. Pero creemos que es importante estar ahí en temporada y fuera de temporada, para que no se nos olvide. Gracias por todo lo que hacéis, tan fielmente".



En Belgrado, el ex preso de Guantánamo Mansoor Adayfi celebró una vigilia en solitario el 4 de junio de 2025.



En Cobleskill, NY, los Peacemakers del condado de Schoharie celebraron una vigilia el sábado 7 de junio de 2025. Sue Spivack escribió: "Nueve Peacemakers se presentaron en nuestra vigilia mensual Global Close GITMO, en solidaridad con todos los otros grupos que piden el cierre de GITMO, y un claro STOP a la transferencia ilegal de migrantes secuestrados a la prisión por el gobierno de EE.UU.. Gracias por todo lo que hacéis para coordinar este proyecto. Y muchas gracias por todos los reportajes que estáis haciendo sobre el genocidio en Gaza".

Inicié las vigilias mundiales coordinadas, con el apoyo de amigos activistas de Estados Unidos, Europa y México, hace 29 meses, en febrero de 2023, y, después de hacer campaña sin descanso durante casi dos años a través de las vigilias para intentar que Joe Biden prestara atención, por fin fuimos recompensados con una oleada de actividad al final de su presidencia, cuando 15 de los 30 hombres que seguían detenidos -la mayoría retenidos durante muchos años desde que fueron aprobados unánimemente para su liberación por procesos de revisión de alto nivel del gobierno estadounidense- fueron finalmente liberados.

Por desgracia, sin embargo, nuestra alegría duró poco. A los diez días de su toma de posesión, Donald Trump decidió utilizar Guantánamo como sede de un espectáculo autoritario de crueldad preformativa, parte de la «guerra contra los migrantes» arrolladora y profundamente racista que declaró al asumir el cargo. En una orden ejecutiva, ordenó al ejército y al Departamento de Seguridad Nacional ampliar masivamente un Centro de Operaciones para Migrantes existente en la base naval -utilizado desde la década de 1990 para retener a los migrantes interceptados en el mar- para albergar hasta 30.000 migrantes.

Se levantaron tiendas de campaña para alojar a los migrantes que se esperaba que llegaran, pero nunca se utilizaron porque no cumplían las normas sanitarias y de seguridad exigidas. En su lugar, entre el 4 y el 20 de febrero, 178 migrantes venezolanos -todos presuntos miembros de bandas, aunque no se aportó ninguna prueba que justificara estas afirmaciones- fueron retenidos en el Centro de Operaciones para Migrantes existente, y también , ilegalmente, en el Campo 6 de la prisión de la “guerra contra el terror”, cuyo uso está estrictamente reservado únicamente a individuos presuntamente implicados con Al Qaeda, los talibanes y fuerzas asociadas, en relación con los atentados del 11-S y otros actos de terrorismo internacional cometidos hace más de dos décadas.

Desafiado en los tribunales, Trump abandonó en gran medida su circo de crueldad en Guantánamo deportando a todos los venezolanos, aunque la base naval y la prisión se han seguido utilizando en los meses posteriores para retener a varios cientos más de migrantes de diversos países, algunos de los cuales han sido posteriormente devueltos a centros de detención del ICE en el territorio continental de Estados Unidos, mientras que otros han sido deportados.

Los deportados incluyen a diez presuntos pandilleros de Venezuela y El Salvador, que el 13 de abril fueron trasladados en avión a El Salvador, para ser encarcelados indefinidamente sin cargos ni juicio en la "megacárcel" CECOT para presuntos terroristas, inspirada en Guantánamo, pero ejecutada a una escala colosal, con capacidad para 40.000 personas, y con la evidente esperanza de la administración Trump de que, al hacerlo, ellos (y otros 238 enviados allí el 15 de marzo) quedarían más completamente fuera del alcance de los tribunales estadounidenses que cualquiera de los detenidos en Guantánamo durante la deplorablemente larga existencia de la prisión de la "guerra contra el terrorismo".

A pesar de las esperanzas de Trump, hay numerosos casos en curso en los tribunales estadounidenses, hasta el Corte Suprema incluido, que desafían la flagrante injusticia de su "guerra contra los migrantes." Uno de ellos, presentado ante el Tribunal de Distrito en Washington, D.C. el día de nuestras vigilias, en nombre de dos ciudadanos nicaragüenses actualmente detenidos en Guantánamo, expone la ilegalidad de usar Guantánamo en absoluto para detener a migrantes previamente detenidos en el territorio continental de los Estados Unidos, mientras que muchos otros casos desafían la base para enviar a los migrantes a un mega-Guantánamo en otro país.

Después de todo, se trata de una política que tiene más en común con las políticas de "entregas extraordinarias" de los primeros años de la "guerra contra el terror" de George W. Bush que con cualquier tipo de programa de deportación legal y apropiado, y se hace aún más repugnante a través de los esfuerzos de Trump para enmarcar las deportaciones como parte de una "guerra" y una "invasión" de pandilleros extranjeros, en la que, al igual que con la "guerra contra el terror", la necesidad de un debido proceso y la evidencia de un delito han sido vergonzosa y peligrosamente descartados. En la "guerra contra el terrorismo", tener barba y ser musulmán era suficiente para asegurarse un viaje de ida a Guantánamo; esta vez, tener tatuajes parece ser la única "prueba" necesaria para justificar un viaje de ida al CECOT.

Si bien todos los que han participado en la campaña por el cierre de Guantánamo durante los últimos 23 años reconocen los alarmantes paralelismos entre la "guerra contra el terrorismo" y la "guerra contra los migrantes", en la que esta última, por supuesto, se está llevando a cabo en el territorio continental de Estados Unidos, con el potencial o incluso la intención de atacar a millones de personas, sigue siendo de crucial importancia que los activistas también mantengan el foco en el "pecado original" de la prisión de Guantánamo.

Sorprendentemente, cuando Trump decidió utilizar el campo 6 de la prisión para retener y utilizar ilegalmente a migrantes, también demostró un total desprecio por los 15 prisioneros de la "guerra contra el terrorismo" que aún permanecen allí, sacando sin problemas a los prisioneros restantes del campo 6 -tres "detenidos de bajo valor" cuya liberación fue aprobada hace tiempo- y derivándolos al campo 5, un centro de máxima seguridad donde siguen recluidos los otros 12 hombres, todos ellos descritos como "detenidos de alto valor", y entre los que figuran tres "presos eternos" que nunca han sido acusados, así como otros nueve acusados (y en dos casos condenados) en el sistema de juicios ante comisiones militares.

El traslado de estos tres hombres borró casualmente un acuerdo, vigente desde 2006, cuando la mayoría de los "detenidos de alto valor" llegaron a Guantánamo procedentes de los "sitios negros" de la CIA, según el cual debían estar permanentemente separados de los "detenidos de bajo valor", para evitar la filtración de cualquier información relativa a los horrores del programa de torturas de la CIA, que, según se alegaba, tendría un impacto devastador en la seguridad nacional de Estados Unidos.

Aunque entre estos hombres se encuentra Khalid Shaykh Mohammad, y otros hombres acusados de participar en los atentados del 11-S, que han sido considerados, durante más de dos décadas, como los terroristas encarcelados más importantes de la historia de Estados Unidos, el reciente circo de crueldad de Trump los marginó tan completamente que fue casi como si hubieran dejado de existir.

La indiferencia de Trump confirma, irónicamente, cómo, casi un cuarto de siglo después de los atentados del 11-S, la prisión de la "guerra contra el terrorismo" ya no tiene ninguna relevancia fundamental, aunque tristemente no hará nada para ayudar a los hombres que siguen detenidos.

Los seis hombres que siguen detenidos sin cargos ni juicio deberían ser liberados, y se deberían llegar a acuerdos de culpabilidad para los hombres que han sido acusados, pero nada de esto, por desgracia, parece probable bajo Trump y su administración, quienes, si se les recuerda la existencia continuada de estos 15 hombres, bien podrían también redescubrir las oportunidades para la histeria que, durante tanto tiempo, han sido abrazadas por republicanos peligrosamente autoritarios.

La indiferencia, entonces, bien puede ser lo mejor que estos hombres pueden esperar bajo Trump, aunque eso no es razón para que no sigamos destacando la injusticia de su encarcelamiento en curso, que sigue siendo tan crucial como siempre lo ha sido, tanto para exponer el abismo entre la retórica de EE.UU. y la realidad con respecto a su detención, y su supuesto respeto por el estado de derecho, y para exponer cómo la continua existencia de la prisión tiene graves repercusiones mucho más allá de sus muros - en particular a través de la existencia de la prisión CECOT, y la depravada alianza de Trump con el presidente dictatorial de El Salvador, Nayib Bukele.

Mientras continuamos nuestras vigilias, esperamos que te unas a nosotros el próximo mes, el miércoles 2 de julio, y el primer miércoles de cada mes hasta que la prisión sea finalmente cerrada.

A continuación puedes ver más fotos de la semana pasada.


Otra foto en el exterior de la Casa Blanca, en Washington, D.C., después de que los manifestantes hubieran sido trasladados. Helen Schietinger escribió: "Después de que se nos uniera Art, la policía cerró Pennsylvania Avenue, como es su práctica arbitraria, y nos trasladamos, junto con grupos de estudiantes, turistas y otros transeúntes, a la acera de Lafayette Square."



Las Raging Grannies en la vigilia celebrada en Nueva York el 4 de junio de 2025. (Foto: Felton Davis).



Fotografiando la vigilia en Nueva York el 4 de junio de 2025. (Foto: Felton Davis).



El activista por la paz Brian Terrell pronuncia un discurso en la vigilia celebrada en Nueva York el 4 de junio de 2025 mientras sostiene una pancarta con un poderoso mensaje. (Foto: Felton Davis).



Otra foto de la vigilia en San Francisco el 4 de junio de 2025.



Otra foto de la vigilia de San Francisco, con Changüisónico, los músicos que interpretan música changüí, descrita como "una música preciosa y conmovedora de Guantánamo, Cuba" por Gavrilah Wells.



Un mensaje importante en la vigilia de San Francisco.



Más música changüí de Changüisónico en la vigilia de San Francisco al anochecer del 4 de junio de 2025.



Otra foto de la vigilia en Los Ángeles el 4 de junio de 2025



Otra foto de los activistas frente al Parlamento Europeo en Bruselas el 4 de junio de 2025.



Otra foto de la vigilia frente al Parlamento Europeo en Bruselas el 4 de junio de 2025, con un activista sosteniendo el cartel que hice en febrero cuando Donald Trump comenzó a usar Guantánamo en su vil y racista "guerra contra los migrantes."


Otra foto de la vigilia ante el Parlamento Europeo en Bruselas el 4 de junio de 2025, con activistas sosteniendo un cartel que celebra la publicación en 2011, por parte de WikiLeaks, de archivos militares clasificados de Guantánamo. Hasta la liberación de Julian Assange el año pasado, los activistas habían pasado muchos años celebrando protestas regulares pidiendo su libertad.



Otra foto de la vigilia en solitario del ex preso de Guantánamo Mansoor Adayfi en Belgrado el 4 de junio de 2025. Mansoor sostenía un cartel en el que aparecían los tres hombres, de los 15 que siguen recluidos, cuya excarcelación fue aprobada hace tiempo: Muieen Abd Al-Sattar, cuya excarcelación se aprobó en 2010, y Gouled Hassan Dourad e Ismael Ali Bakush, cuya excarcelación se aprobó en 2021 y 2022.



Otra foto de la vigilia en solitario del ex preso de Guantánamo Mansoor Adayfi en Belgrado el 4 de junio de 2025. Mansoor sostenía un cartel en el que aparecían los seis hombres, de los 15 que siguen recluidos, que nunca han sido acusados. Además de los tres hombres cuya excarcelación está aprobada desde hace tiempo, entre los seis figuran también los tres "presos para siempre" restantes, que nunca han sido acusados de ningún delito, pero cuya excarcelación tampoco está aprobada: Abu Zubaydah, Abu Faraj Al-Libi y Muhammad Rahim.



Activistas en Ciudad de México preparando las pancartas utilizadas en su vigilia del 4 de junio de 2025.



Una foto tomada en la vigilia londinense del Campamento Comunitario para Gaza. (Foto: Andy Worthington).



La bandera palestina junto al río Támesis en la vigilia de Londres. (Foto: Andy Worthington).



Y, por último, el mensaje más importante de todos en el Campamento Comunitario para Gaza en Nine Elms, Londres. (Foto: Andy Worthington).


 

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